martes, 17 de enero de 2012

Prometo que no voy a pensar más en ti.

Y puede que me cansará de esperar el fuego de tus labios, o que empezase a odiar tachar los días del calendario para verte. Puede que el alcohol me diera las fuerzas para pasar página de un cuento que no tenía introducción por ninguna parte, o simplemente que decidiese tirar el libro a la basura y dejar de destruir árboles a lo tonto. Puede que tu indiferencia me hiciese derrumbarme un poco más o que vi un rallo de luz en su sonrisa, aunque la tuya siempre me cegase. Pero lo indudable fue, que pasó. Que actúe, elegí, te cambie. Puede que me arrepienta todas las noches antes de dormir o puede que él por fin convierta este corazón de hielo en ese amor que tanto luche porque me dieras tú.

No hay comentarios:

Publicar un comentario